Este 17 de noviembre, en el Hotel Real Internacional, ubicado en Escazú. La cámara de Comercio Franco-Costarricense celebra su evento tradicional Beaujolais Nouveau. Uno de los encuentros gastronómicos y de negocios más importantes de cada año. Donde se da espacio a las relaciones diplomáticas y a los representantes de todos los sectores empresariales del país, uniéndose así, para festejar un año de trabajo y la nueva cosecha vinícola.
Esta vez, en su vigesimoquinta edición, la CCI Franco Costarricense con ayuda de Paradise Engine Costa Rica, ha preparado una serie de artículos para aquellos interesados en aprender más sobre la historia del vino, el beaujolais y la Belle Epoque, la cual será la temática de esta edición. Sin más, le damos la bienvenida a este pequeño recorrido sobre la historia del vino.
El vino, esa sublime y enigmática bebida que ha acompañado a la humanidad a lo largo de los siglos, tiene una historia tan rica como compleja. Desde tiempos remotos, el vino ha sido parte integral de la cultura, la religión y la gastronomía de civilizaciones alrededor del mundo. Su origen se encuentra entrelazado con la historia misma de la agricultura y la humanidad.
Los orígenes exactos del vino se pierden en la bruma de la prehistoria, pero se cree que el proceso de fermentación, esencial para la creación del vino, fue descubierto de manera accidental. Es posible que, tras recolectar uvas y otros frutos, notaran que con el tiempo estas se convertían en una sustancia líquida y embriagadora. La fermentación, impulsada por levaduras naturales presentes en la piel de las uvas, transforma los azúcares en alcohol, creando así el vino primitivo.
Las primeras evidencias documentadas del cultivo de la vid y la elaboración de vino provienen de la antigua Mesopotamia, donde los sumerios cultivaban uvas y consideraban al vino un regalo de los dioses. En las tablillas cuneiformes, se encuentran referencias a deidades vinculadas al vino y a rituales religiosos que involucran su consumo. El vino también tenía un papel importante en la economía y el comercio de la región.
Es entonces viable pensar que desde hace varios siglos el comercio de la uva y los vinos, su origen, tradición, sabor y procesos han determinado el valor, la reputación y la importancia de una zona vinícola, procesos que sin duda se mantienen hoy en día.
La historia del vino se expandió hacia la antigua Grecia y Roma, donde esta bebida se convirtió en un elemento central de la vida cotidiana y la cultura. Los griegos tenían un dios dedicado al vino, Dionisio (conocido como Baco en la mitología romana), y consideraban el vino como una fuente de inspiración artística y poética. En Roma, el vino estaba presente en todas las capas sociales y se le atribuían propiedades medicinales y rituales.
Es importante tener en cuenta que las bebidas fermentadas, por su concentración de alcohol, eran frecuentemente más seguras de beber que la misma agua. En épocas dónde se desconocía la existencia de bacterias, virus y microbios y de la importancia de los procesos de curación, pasteurización y preservación de los alimentos, consumir bebidas con porcentajes de alcohol como los vinos y las cervezas reducían el riesgo de enfermarse por la ingesta de patógenos, siendo comprensible así la atribuciones de propiedades mágicas y providencia divina de las fermentaciones.
Durante la Edad Media, el vino continuó desempeñando un papel importante en la sociedad europea, especialmente en el contexto de la Iglesia Católica. El vino se utilizaba en la Eucaristía y tenía un papel simbólico en las ceremonias religiosas. Los monasterios desempeñaron un papel crucial en la preservación y desarrollo de técnicas de cultivo de la vid, el desarrollo de nuevas especies de uvas y elaboración del vino.
Con la expansión de los imperios y las exploraciones, las vides y las técnicas de producción de vino se diseminaron por todo el mundo. Desde España hasta América, pasando por Sudáfrica y Australia, nuevas regiones vinícolas surgieron, cada una con sus propias variedades de uva y métodos de vinificación.
Con la Revolución Industrial, la producción de vino se industrializó y se introdujeron avances tecnológicos que permitieron una mayor consistencia en la calidad y el sabor. Se desarrollaron técnicas de embotellado, almacenamiento y transporte que contribuyeron al crecimiento global de la industria vinícola.
Hoy en día, el vino es una de las bebidas alcohólicas más consumidas y apreciadas en todo el mundo. La diversidad de variedades de uva, métodos de producción y regiones vinícolas ha llevado a una amplia gama de sabores y estilos de vino. La cultura del vino se ha convertido en un arte en sí mismo, con sommeliers, catadores y amantes del vino que exploran sus matices y complejidades.
El vino, con su historia milenaria y su profunda conexión con la humanidad, sigue siendo una fuente de inspiración y admiración. Desde sus humildes inicios en la fermentación natural hasta las bodegas modernas y las técnicas de viticultura avanzada, el vino ha recorrido un largo camino, enriqueciendo nuestra cultura y deleitando nuestros sentidos a lo largo de los siglos. Brindemos por el pasado, el presente y el futuro de esta bebida que ha acompañado a la humanidad en su viaje a través del tiempo.
La Cámara de Comercio Franco Costarricense extiende a todos sus afiliados, amigos y público en general a participar de la vigesimoquinta edición de Beaujolais Nouveau a celebrarse el 17 de Noviembre en el Hotel Real Intercontinental en Escazú.
El Beaujolais Nouveau de la CCI France Costarricense es el evento empresarial y gastronómico más importante del año.
Agradecemos a nuestros patrocinadores sin quienes este evento no sería posible.
En un mundo que a menudo se encuentra en constante cambio y evolución, hay períodos de la historia que resplandecen con un encanto y un
Este 17 de noviembre, en el Hotel Real Internacional, ubicado en Escazú. La cámara de Comercio Franco-Costarricense celebra su evento tradicional Beaujolais Nouveau. Uno de
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